Blogia
Filosofía desde la trinchera

<!-- /* Style Definitions */ p.MsoNormal, li.MsoNormal, div.MsoNormal {mso-style-parent:""; margin:0cm; margin-bottom:.0001pt; mso-pagination:widow-orphan; font-size:12.0pt; font-family:"Times New Roman"; mso-fareast-font-family:"Times New Roman";} @page Section1 {size:595.3pt 841.9pt; margin:70.85pt 3.0cm 70.85pt 3.0cm; mso-header-margin:35.4pt; mso-footer-margin:35.4pt; mso-paper-source:0;} div.Section1 {page:Section1;} -->

                                   30 de octubre de 2009

 

            Vamos esto es increíble, la propuesta que hace ahora el ministro de educación, Gabilondo, aumentar la obligatoriedad hasta los 18 años. Pero, ¿qué coño se piensan esta gente, que por estar más tiempo los alumnos jodiendo la enseñanza más nivel cultural o formación profesional van a tener? ¿dónde se ha visto tamaño despropósito?. Pero si uno de los perores males de la enseñanza está en la obligatoriedad hasta los 16 años, esto ha hecho que proliferen un montón de artilugios educativos, de nombres impronunciables para que los alumnos terminns la enseñanza a los 16 años, además, prorrogables hasta los 18. Desde luego que tenía que ser un catedrático de metafísica al que se le ocurriera esto. Cuando entran en la política, por muy académicos que sean, se vuelven iditas y estúpidos. Será que tendrán que justificar su puesto de trabajo con alguna medida. O padecerán el complejo de Erostratos y querrán ser conocidos y pasar a la historia, para lo cual cometen un tremendo atropello. La verdad es que cada día entiendo menos la política, no sé de dónde proceden sus razones, si de la razón, del corazón, de la estupidez, de las nubes, de los intereses particulares, de la obediencia a un credo; el caso es que dejan de ser personas, obedecen ciegamente y empiezan a desbarrar, con el peligro que conlleva eso para la ciudadanía.

0 comentarios