Con referencia al artículo de Vargas Llosa y el libro Superficiales: lo que internet está realizando con nuestras mentes.
Sí que lo es y el libro que leí hace unos meses tiene una argumentación histórico-cultural y neourofisiológica contundente. Yo me había observado a mí mismo y escribí un artículo en ese sentido basándome en mi ligera transformación. Pero, como dice Álvaro, no hay que ser catastrofista. Pero su juicio tiene una validez parcial. Para los que nos hemos educado en el libro y somos amantes de ellos y tenemos plenamente desarrollada nuestra capacidad de atención y aislamiento por medio de la lectura, el peligro está ahí, pero hay que hacer que ambas actividades sean complementarias y se retroalimenten. Lo malo son los que sólo se han educado en las nuevas tecnologías. Su grave problema es que su cerebro se ha adaptado, físicamente digo, a una forma de conocimiento que es tremendamente superficial e incapacidad de mantener la concentración en algo durante mucho tiempo. Ha aportado otras cosas, como la capacidad de realizar multitareas, la capacidad de dispersar la atención, la capacidad de seleccionar información con rapidez y muchas cosas más. Pero el problema es que se llegue a una sustitución, en lugar de a un enriquecimiento. Saludos.
0 comentarios